domingo, 12 de septiembre de 2010

TAN SOLO CALLA


Callar es lo más difícil que puede hacerse en este mundo,
Callar, cerrar los ojos,
Apretar los puños,
Pasar un trago amargo
Y sentir que la garganta se seca poco a poco.

Callar…… y sentir que te estrujas por dentro,
Matar tus sueños,
Ocultar tus pensamientos,
Pensar que eres fuerte,
Sentir que no eres nadie.

Hoy callo, y ya no sé si siquiera te importe mi silencio,
Si por cuánto tiempo
Valdrá la pena mi silencio
Necesito al menos una palabra un sueño
Para saber quién era, quien soy y quien sigo siendo.




SI ALGUN DIA PUDIERAS VER DENTRO DE MI,


SABER LO QUE SIENTO Y LO QUE NECESITO DIA A DIA


VERAS QUE SENCILLA PERO GRANDIOSA PUEDE SER LA VIDA


AMAR LO MAS SIMPRE, PERSEGUIR UN SUEÑO,


TENER ALGO QUE TU CORAZON PUEDA SENTIR


VIVIR POR ELLO, VIVIR POR ALGO


QUE TODO LO HAGA BELLO




ILY

viernes, 10 de septiembre de 2010

EL RELOJ

Hay en una de las paredes de mi cuarto un hermoso reloj antiguo que ya no
funciona. Sus manecillas detenidas casi desde siempre, señalan
imperturbables la misma hora: las siete en punto.

Casi todo el tiempo, el reloj es sólo un inútil adorno en una blanquecina
y vacía pared.

Sin embargo hay dos momentos en el día, dos fugaces instantes en que el
viejo reloj parece resurgir de sus cenizas como un ave fénix.

Cuando todos los relojes de la ciudad, en sus enloquecidos andares marcan
las 7 y los cu-cu y los gong de las demás máquinas hacen sonar por 7 veces
su repetido canto, el viejo reloj de mi habitación parece cobrar vida.

Dos veces por día, a la mañana y a la noche, el reloj se siente en
absoluta armonia con el resto del universo.

Si alguien mirara el reloj solamente en esos dos momentos, diría que
funciona a la perfección.

Pero pasado ese instante, cuando los otros relojes han acallado su canto y
las manecillas siguen sus monótonos caminos, mi viejo reloj pierde su paso
y permanece fiel a aquella hora que alguna vez detuvo su andar.

Y yo amo ese reloj y cuanto más hablo de él, más lo amo, porque cada vez
me siento más parecido a él.

También yo estoy parado en un tiempo, también yo me siento clavado e
inmóvil, también yo soy de alguna manera un adorno inútil en una pared
vacia.

Pero tengo también fugaces momentos en que, misteriosamente, llega mi
hora.

Durante esos tiempos, yo siento que vivo. Todo está claro y el mundo se
transforma en maravilloso. Yo puedo crear, soñar, volar, decir y sentir
más cosas en esos instantes que en todos los otros momentos. Estas
conjunciones armónicas se dan y se repiten una y otra vez, como una
secuencia inexorable.

La primera vez que lo sentí, traté de aferrarme a ese instante creyendo
que podría hacerlo durar para siempre. Pero no fue así. Como a mi amigo el
reloj, también a mí se me escapa el tiempo de los otros.

... Pasados estos momentos, los otros relojes que anidan en otros hombres,
continuan su giro y yo vuelvo a mi rutinaria cotidiana , a mi trabajo, a
mis charlas de café, a mi aburrido andar que acostumbro a llamar vida.

Pero yo sé que la vida es otra cosa.

Yo sé que la vida, la vida de verdad es la suma de aquellos momentos que
aunque fugaces, nos permiten percibir la sintonía con el universo.

Casi todo el mundo, pobre, cree que vive.

Sólo hay momentos de plenitud y aquellos que no lo sepan e insistan en
querer vivir siempre, quedarán condenados al mundo gris y repetitivo andar
de la cotidianeidad.

Por esto te amo, viejo reloj, porque somos la misma cosa tú y yo.

NO DEJES PASAR LAS COSAS SIMPLES


Tan solo de repente entre las cosas que suceden al VIVIR día a día, encontré ese algo que haría que ese día fuese diferente, esa cosita especial que por más simple que parezca Hizo que sea distinto a los demás, ese algo que siempre debemos encontrar para que todo tenga sentido, la chispa que enciende tus ganas de vivir, tus ilusiones y tus emociones, aquellas que NUNCA!! pase lo que pase deben dejar de latir en tu corazón, ……. Y sin embargo me sentí rara, extraña, con un leve cosquilleo que me hizo buscar esas cosas dentro de mí, cada noche que pasa me duermo con la esperanza de levantarme y tratar de vivir sin errores, con amor, con ilusión, con metas inmensas. Sin embargo he de comprender que la meta no es esperanzarse en vivir cada día mejor, la meta es luchar por lo que eres por tus sueños, por uno mismo, tal vez pensé erróneamente en no querer ser egoísta, tal vez adormecí aquellas emociones e ilusiones tratando de callar y no permitirme ni siquiera escribir, plasmar lo que sentía, soñar cada dia!!!!!, alimentarme poco a poco de eso tan hermoso que me provoca la sensación de escribir y de soñar, de tan solo decirme a mi misma que es lo que siento aunque sean cosas completamente absurdas que no tienen sentido..............SOLO PARA MI, pero lo que yo pueda sentir, esa felicidad me hara lograr cambiar tambien la vida de los demás!!!!!!!!!!!!!!!